Ser el cuidador primario de un paciente es un acto de amor, solidaridad y responsabilidad. Al mismo tiempo es un trabajo duro que puede llegar a ser muy exigente tanto física como emocionalmente.
Está demostrado que las personas que tienen a su cargo enfermos crónicos, sufren más depresiones, ansiedad, estrés, y empeoran su estado físico general ya que, con demasiada frecuencia, ignoran sus propias necesidades, priorizando las de la persona enferma.
Muchos cuidadores se sienten solos, ansiosos, culpables, furiosos, asustados, confundidos o cansados, estos sentimientos resultan abrumadores. Buscar ayuda profesional es la clave ya que mejora la calidad de vida de los cuidadores, y repercute directamente sobre la calidad de vida de las personas que reciben los cuidados.
Presència Activa ofrece una terapia psicológica enfocada a apoyar a los familiares de enfermos mentales y/o de otras enfermedades crónicas, para ayudarlos a solucionar las dificultades del día a día con el paciente, hacer descarga emocional, crear espacios de distanciamiento con la enfermedad y ofrecerles herramientas para cuidarse a sí mismos.